Aceitera Vinagrera
ACEITERA VINAGRERA
La “madre”, que será quien dirige el juego, sentada en un poyete sujeta al que se la queda, que estará agachado sobre las rodillas de la madre, con los ojos tapados por las manos de ésta. El resto de niños se colocan alrededor del que se la queda.
Una vez todos colocados, comienzan a cantar la
canción. Si algún jugador no canta o se pierde en la canción, pasará a ser el
que se la queda, siempre bajo el mando de la madre. La canción se irá cantando
haciendo lo que se dice en ella.
Existen distintas versiones de la canción, expongo alguna de ellas:
Amagar, amagar y no dar ( Aquí amagan dos veces un azote al que se la
queda, sin llegar a dar).
Dar sin reír ( Aquí da un golpecito en el culo del que se la
queda, el jugador designado por la madre y no se podrán reír. Él que lo haga
pierde)
Sin hablar (
Aquí hacen el gesto de taparse la boca con el dedo índice extendido sobre los
labios cuando toca decir la palabra ” hablar”. El que la dice pierde)
Un pellizquito en el culo (
Aquí da el pellizquito el jugador designado por la madre, que lo señala sin
decir el nombre)
y a echar a volar. Todos salen a
correr.
Otra versión:
Las indicaciones son, por este orden: aceitera, vinagrera, trascorral, que consiste en un palmetazo, no muy fuerte, sobre la espalda del reo. Amagar y no dar, dar sin reír y dar sin hablar, consisten exactamente en hacer lo que indica estas órdenes, cuyo incumplimiento acarrea la posición de reo para el infractor. La última orden es "un pellizquito en el culo y echar a volar". En este momento todos salen a correr .Cuando el que se la queda escucha las siguientes palabras de la madre: “Que va, mi gavilán, con cuatro uñas de gato, como no me traigas “chicha”, las orejas te las arranco” La persecución dura hasta que la madre llama a los jugadores con la fórmula: "Ovejitas al redil, que la noche se va a venir". Si el reo atrapa algún jugador, éste pasará a la posición de reo y, si no, el reo seguirá en su puesto hasta que atrape un jugador o este cometa una infracción.
Otra
versión distinta:
“Aceitera,
vinagrera, ras con ras, amenazar pero no dar, dar sin temer, dar sin hablar, un
pellizquito en el culo y a volar”.
A
partir de este momento, todos corren y se esconden. Una vez escondidos, la
madre mantiene con ellos el siguiente diálogo:
- ¿Suelto la jaula?
- Suéltela usted, madre
- ¿ Y si os coge?
- Déjelo usted
La
madre a continuación dice: “ Allá va un
gavilán con uña de gato, si no me traes uno por la oreja te mató”.
El
que hace de burro busca a los que están escondidos, si encuentra a alguno lo
llevará hasta dónde está la madre y este será ahora el burro, si no consigue
coger a ninguno , él seguirá siendo el burro.
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